Crítica de Arte

jueves, 21 de agosto de 2014

Complex Antiform: Una fusión de conceptos antagónicos.


Complex Antiform:
Una fusión de conceptos antagónicos

“La máscara es el otro yo (…) es expresión de la personalidad suprareal del hombre."

PAUL WESTHEIM

Georgina Sánchez Celaya/Historiadora del Arte

Al mirar la serie Complex Antiform, pensarás en imágenes confusas, -como una nebulosa salpicada de materiales rocosos producto de una explosión en el universo- ahora bien, puedes seguir o abandonar la idea. Decidiste continuar, entonces, tu vista transitará por un remolino de conceptos antagónicos aterrizados en la materialidad pictórica: implosión-explosión, concavidad-convexidad, expansión-contracción, fuerzas centrifugas en oposición a las fuerzas centrípetas, formas amorfas que se desbordan en el espacio, pero a su vez, no dejan de estar contenidas por los límites del lienzo. No obstante, todo este remolino de contradicción abstracta, parte de un principio figurativo tan arcaico como el arte mismo: la máscara. Quizá no las veas, quizá en algunas piezas las descubras y las reconozcas, y así te percates que son un referente visual tan arraigado en nuestra memoria colectiva, que las reconocemos sin importar de que periodo histórico provengan o a que cultura pertenezcan.
En la serie Complex Antiform, la máscara prehispánica es el núcleo unitario que da vuelo al proceso creativo del artista, es además, el eje medular del cual se desprenden los demás elementos pictóricos, como la línea, el color y la textura. La máscara no sólo implica la posibilidad de escondernos y ocultar nuestro verdadero rostro, en su definición mágico-religiosa, es parte de un ritual, y a través de su uso, se propicia la transmutación del hombre que la porta. Como ha señalado Paul Westheim la máscara “es la fuga hacia otra personalidad”, y las pinturas que en esta ocasión nos presenta Francisco Muñoz, bien podrían entenderse como ejercicios no sólo pictóricos sino escultóricos en los que el artista se fuga de sí mismo.
Todas las pinturas que conforman la serie Complex Antiform se definen por principios duales y se debaten en la eterna dicotomía de lo abstracto y lo figurativo. Cada pieza fue realiza con rapidez –algunas en cuestión de horas-, por lo pueden pensarse como el resultado de un ejercicio dancístico, es decir, como algo espontáneo pero a la vez producto de la práctica constante, o bien, como las rutinas de un entrenamiento físico exhaustivo; lejos de ser una práctica premeditada que deriva de una larga y forzada reflexión filosófica. Es por eso que la pintura de Francisco Muñoz resulta dinámica, vivaz y explosiva, pero no por eso carece de un largo y estudiado proceso de trabajo, en el que se cuelan la experimentación, el aprendizaje constante y la asimilación de otros estilos sin necesidad de copiarlos.
Frank es un artista que se enfrenta y se arroja al lienzo sin miedo, quizá por eso obtiene resultados formales que el mismo califica de burdos o primitivos, conceptos que ya no tienen más una connotación peyorativa para el arte, pues en un mundo abarrotado de estímulos, no sólo visuales sino auditivos, donde la saturación de imágenes crece exponencialmente, pareciera que un retorno a los orígenes, a lo primitivo, es algo digno de anhelar.
Para el artista, un sólo lienzo es insuficiente, apenas en una serie logra satisfacer su compulsión por la pintura, la cual siempre lleva al límite, momento en el que decide reinventarse. Actualmente Francisco Muñoz atraviesa por un nuevo periodo en su carrera artística, donde se aprecia una mayor cohesión y nivel de diálogo en los elementos pictóricos que componen sus piezas. Después de la serie Coatlicue UFO -el alter ego futurista de la diosa madre prehispánica-, Complex Antiform llega como un escalón más en su trayectoria el cual, sin duda, pronto será superado por la inquietud y la tenacidad que caracteriza al artista.
No queda más que invitarlos a este baile de máscaras para disfrutar lo complejo de la forma, pero también la simplicidad de este tipo de pintura que se presenta al público de manera natural y sin pretensiones.

Más imágenes de la exposición en el tumbler del artista:


Imagen del texto de sala que escribí para la exposición "Complex Antiform." en Oficina de Arte Foto: Francisco Muñoz.





viernes, 8 de agosto de 2014

Alquimia, principio de creación: "Suceso colateral" de Julie Escoffier








Alquimia, principio de creación:
Suceso Colateral de Julie Escoffier


Por Georgina Sánchez Celaya



Desde 2012, la marquetería Casa Rosano, ubicada en Orizaba 101 en la Colonia Roma, se transforma –por un breve lapso de tiempo–, en un espacio dedicado a la exhibición de arte; de ahí que en su faceta de galería se anuncie al público como “Breve”. 

El pasado jueves 31 de julio de 2014, se inauguró en Breve Suceso Colateral, una exposición que presenta el trabajo más reciente de Julie Escoffier, una joven artista originaria de Lyon, Francia, quien actualmente se encuentra haciendo una estancia en México por segunda ocasión. 

Cuenta Julie que, desde pequeña, le gustaba jugar y hacer dibujos con cloro (Cl), y confiesa que, por alguna extraña razón que desconoce, el químico también le resulta agradable al olfato; esto no debe parecernos algo raro pues, los aromas detonan recuerdos, de hecho, he de confesar que yo también encuentro algo de agradable en el aroma de este halógeno en su presentación comercial, sin embargo, cada quien lleva sus gustos y obsesiones a diferentes puertos, y en esta ocasión, la artista francesa decidió hacer de este químico uno de sus principales elementos para la experimentación artística.

Una de las piezas centrales que constituye la muestra, es una instalación ubicada en la vitrina de la marquetería-galería. La obra consta de dos rollos de papel no-tejido –un tipo de papel muy similar al tapiz–, ambos están intervenidos con tintas y suspenden desde el techo. Una parte de los rollos está expuesta al contacto directo con el cloro, y mediante su absorción, dos fenómenos ocurren de manera paralela, por un lado, el cloro reacciona con las tintas y actúa como una especie de revelador, detonando resultados azarosos, por ejemplo la aparición de colores y degradados inesperados. Mientras que, por otro lado, el papel que está sumergido en el cloro se “purifica”, se torna nuevamente blanco y vuelve a su estado “natural”; de manera metafórica, es la promesa de un recomienzo, pues un lienzo o un pedazo de papel que fue intervenido por el color, al ser blanqueado, puede ser pintado de nuevo, con resultados distintos a los originales. 

Lo interesante de observar el trabajo de Julie Escoffier, es el hecho de poder deconstruir los procesos que subyacen en sus obras, para lo cual, –como en la mayoría de las obras de arte contemporáneo–, se necesitan algunas pistas; mirar los resultados de sus creaciones es como tratar de resolver una adivinanza o armar un rompecabezas, y para el observador, siempre es un reto entrar al juego a la vez que una satisfacción. Esta faceta del trabajo artístico que Escoffier está desarrollando actualmente, guarda cierta relación con la experimentación alquímica que caracterizó los comienzos de la fotografía y la pintura. De hecho, como ella misma reconoce, al experimentar con cloro, no sólo está aludiendo a los principios del proceso fotográfico –por ejemplo al momento de que dicho elemento actúa como agente para el revelado–, sino al principio químico que posibilitó la pintura, pues como explica la artista, el blanqueamiento de las telas fue una condición necesaria para poder preparar los lienzos que, como bien sabemos, son la base de la pintura al óleo. 

La artista francesa también ha llevado la experimentación plástica al terreno de lo escultórico. En la exposición se muestran una serie de vaciados en yeso que han sido intervenidos con químicos fotográficos, tintas y cloro. Los resultados en cada pieza son distintos según los materiales y las técnicas empleadas, para algunas piezas la artista ha utilizado la cianotipia, una técnica fotográfica que se popularizó a finales del siglo XIX en la que se emplean sales de hierro, las cuales dan un color azulado a las fotografías. En algunas piezas hay formas y detalles casi imperceptibles al ojo, como en Cyanotype After Form 1, donde aquellos destellos blancos son la huella de moscas para pescar, anzuelos disfrazados de insectos que aluden a la mímesis en el proceso fotográfico, donde lo captado por el lente no es más que el residuo de varios procesos químicos que se asumen como la representación fidedigna de la realidad. Al igual que las mosca para pescar, la fotografía es sólo un anzuelo, una trampa que lejos de ser la imagen de la realidad es una realidad en sí misma. Finalmente, en el trabajo de Escoffier, se mezclan tanto la fotografía como la pintura y la escultura para formar piezas únicas que muestran la inquietud de la artista por encontrar un lenguaje propio, un camino por el cual aún está transitando. 

Las piezas que constituyen esta exposición, son resultado de una combinación muy interesante que parte de la reflexión del quehacer pictórico y fotográfico; en el trabajo que actualmente está desarrollando Julie Escoffier se intersecan desde sus inquietudes de infancia, hasta la experimentación alquímica como origen y principio de la ciencia química -en este caso aplicada a la creación artística-, así como el azar y el accidente, dos factores que definen gran parte del desenlace de sus piezas. En las obras expuesta en Breve, subyace algo que indica al espectador que es testigo del proceso artístico que la obra ya no volverá a ser la misma, y ese “algo” es precisamente el accidente, los pequeños detalles que quedan en el papel como evidencia del cambio, o quizá es sólo el hecho de que la transformación tiene testigos que pueden dar fe del cambio. 

La invitación a Breve es para aquellos observadores pacientes que aún sean capaces de asombrarse con los detalles, y para aquellos que quieran parase frente a una vitrina y observar por unos minutos, un fragmento del actual proceso artístico que está desarrollando la artista junto con sus resultados azarosos, o bien para aquellos curiosos que acepten el reto de deconstruir las obras, armar el rompecabezas y jugar con la esfinge y sus adivinanzas. La invitación al juego del arte y las pistas ya están sobre la mesa. 




Galería Breve/Casa Rosano
Orizaba 101 Col. Roma
Local D
FB Breve


Artículo publicado en el portal Arte MX.
Link del portal: 
Arte MX Suceso Colateral

"Más allá de la filantropía: el nacimiento del Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey"

 

Artículo: "Más allá de la filantropía: el nacimiento del Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey" publicado en la revista digital  Discurso Visual, del Cenidiap.

 

Link del texto:

Más allá de la filantropía

 

Link de la Revista:

Discurso Visual 

 

Cómo citar el artículo:

·  Georgina Sánchez Celaya, "Más allá de la filantropía: el nacimiento del Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey", en Discurso Visual Revista Digital, México, Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap)-Instituto Nacional de Bellas Artes, tercera época, julio-octubre, núm. 34, 2014. pp. 32-40.

ISSN 1870-3429.

domingo, 6 de abril de 2014

Un fallo de la Mátrix. Efemérides Habitables un dejá vu de la historia oficial



 

Un fallo de la Matrix

Efemérides Habitables un dejá vu de la historia oficial


Por Georgina Celaya

Imagen y memoria son poder. La fotografía como representación encierra el poder de enunciar, y al igual que en la escritura de la historia –un acto creativo-narrativo de copy paste más interpretación subjetiva–, también hay omisiones. Por otro lado, la memoria es un cúmulo de recuerdos resumidos en imágenes, los cuales también se activan –irónicamente– a partir de imágenes; es además un acto caprichoso, rebelde y azaroso, condición que le otorga aún más poder a la imagen. Entonces, la fotografía puede ser no sólo el detonante de la memoria, sino la representación fidedigna de la “verdad” y lo “real”, lo que sea que esos conceptos signifiquen. Siguiendo la ecuación antes planteada, la fotografía en su papel de documento es doblemente poderosa, pues es la chispa y el vehículo de la memoria, así como la enunciación de la verdad y la realidad. 
No obstante, en medio de este torrente de conceptos complejos y abigarrados (memoria, imagen, poder, representación, verdad y realidad), sólo deberíamos preguntarnos por una cosa: las omisiones que se generan en el marco de la visibilidad. Ésta parece ser la inquietud del artista visual Félix Luna y el eje del proyecto Efemérides Habitables, actualmente en la Galería Luis Adelantado, el cual lleva la ausencia al terreno de la materialidad y el espacio, un acto de alquimia que sólo se puede realizar en y con el arte. 
La idea del proyecto surgió de la experiencia del artista y el curador Andrés Aguilera Patiño en la exposición México a través de la fotografía, inaugurada en el MUNAL a finales del 2013. En esta ambiciosa muestra, con afán de mostrar el “devenir histórico nacional”, en el mismo tenor que gran parte de las exposiciones de arte nacional montadas en el extranjero durante el siglo XX, el artista pudo identificar ciertos “faltantes” –como lo acontecido en 1968, por ejemplo–, los cuales se traducen en omisiones de hechos históricos que, finalmente, también forman parte de eso que se identifica como el devenir de la historia. 
Este tipo de exposiciones que presentan un continuum en la historia a través del arte –muy en el estilo museográfico que ensayó Fernando Gamboa–, han hecho aún más evidentes las fracturas, las discontinuidades y la falta de relación entre una serie de objetos, hechos, personas y lugares del pasado y del presente, las cuales pocas veces el ojo del espectador llega a percibir y a cuestionar. En esas grietas generadas in situ por la exposición México a través de la fotografía, Félix Luna ha decido insertarse para crear una especie de no lugar de la memoria oficial, el cual surge a partir de un acto de apropiación y subversión como ha señalado ya el historiador Víctor Osorio, uno de los colaboradores en el proyecto de Luna. Sin embargo, algo que no han advertido tanto el artista como los participantes de Efemérides Habitables es que, al mismo tiempo que enuncian y anuncian la exposición como un acto en contra del “orden dominante”, anti-oficial y anti-institucional, inevitablemente están fungiendo como agentes de la memoria de la llamada historia oficial, que se ha venido criticando a nivel historiográfico desde los años 60, lo cual ha derivado no sólo en una nueva forma de contar y narrar, sino en el empleo de nuevas metodologías para historiar. De esta manera, desde la trinchera de las artes visuales,  Luna ha desarrollado un método para contar una historia propia que califica de autobiográfica –aclara– no porque sea un relato de su historia personal, sino por lo significativo del proyecto en su trayectoria artística. 
Con meticulosidad, rigor histórico y cierto grado de obsesión, Félix ha reproducido en la Galería Luis Adelantado parte de la exposición fotográfica llevada a cabo en el MUNAL, pero alterándola, descomponiéndola, generando nuevos núcleos temáticos y nuevos vínculos entre las fotografías. La estrategia artística en esta ocasión no consistió en añadir esos “faltantes”, sino en reproducir y alterar, borrar, mutilar, rayar, desenfocar, pintar, todo envuelto en una acto “amoroso” que consistió en recubrir las piezas con cal, para de forma simbólica, conservarlas. 
La memoria selecciona y si bien no borra encripta, como lo hacen los buscadores de Internet, y hunde las imágenes, los recuerdos y las sensaciones en lo más profundo de nuestro inconsciente. La memoria es reacia, volátil, poco fiel y voluntariosa. Por más que se intente no puede domarse, es un libro cerrado que tiene que desplegarse para activarse, el cual precisa de una mirada externa. En este sentido, el proyecto Efemérides Habitables, vendría a ser esa mirada externa que permite se active el recuerdo –un fenómeno sináptico borroso que siempre tiende a fallar–; y, si bien no es un acto conmemorativo sino subersivo, si es un ejemplo de cómo funciona el acto de recordar, así como la memoria, y cómo ésta construye y de construye, cómo crea y recrea, cómo entierra o hace florecer. La propuesta de Félix Luna es, desde mi punto de vista, un  dejá vu (lo ya visto), pero no como una simple repetición de un mismo acontecimiento, sino como un síntoma de un fallo en la Matrix, que puede hacerse cada vez más grande. Un síntoma de un fallo en la Matrix, que puede hacerse cada vez más grande.



Galería Luis Adelantado, está abierta al público de lunes a viernes de 9:00 a 14:00 y de 15:00 a 18:00 hrs.  Sábado previa cita. 
Laguna de Términos 260
Col. Anahúac
11320 México D.F.
Para más información del proyecto consultar: 
https://sites.google.com/site/efemerideshabitables/ 











viernes, 31 de enero de 2014

Producción literaria: "La cena".


Colaboración en el núm. 17 de la revista literaria FATUM. El andar de las letras. 

La Cena


Gregoria no tenía más que su joven corazón lleno de vida y ganas de amar, así que decidió ofrecerlo para La Cena. Lo puso a descongelar, le quitó todos los miedos, lo limpió de viejas heridas, rencores, pellejos, celos, grasa y malos sentimientos. Le deshuesó el dolor, lo puso a hervir dos veces en agua de mar como se hace con el pulpo o con el bacalao, para que no supiera a "amores pasados". Lo marinó, lo aderezó, lo metió al horno para que emanara calor y fuera un lugar acogedor. Lo sirvió con una guarnición y una ensalada: un coño bien húmedo, unos senos pequeños, dos nalgas grandes como papas y dos piernas delgadas como espárragos, bien torneadas. Puso la mesa, las velas y los manteles largos. Llegó el invitado. Se sentó. Destapó una botella de vino cosecha 2008, una rara mezcla de dos uvas de la alta y la baja California: seducción femenina y feromonas. Bebió la botella entera. Le trajo el platillo; sin preámbulo fue directo a la guarnición y a la ensalada, se la comió toda y repitió 1, 2, 3, 4 veces. El corazón que se le ofrecía ni lo tocó, tal vez el invitado era vegetariano. Terminó la velada. Los amantes se despidieron sin la promesa de volverse a ver. Con un profundo hoyo en el pecho y un hueco en el estómago, Gregoria guardó nuevamente la cena en la nevera, no fuera siendo que la indiferencia echare a perder su corazón. Mientras tarareaba amores incompletos de Los Tres, dos lágrimas rodaron por sus mejillas, las tomó suavemente con las yemas de sus dedos y las guardó en un salero, una era para cocinar la próxima cena, la otra era para la sal de sus historias.

Medio Ambiente: "Oro no vale más que agua"


“Oro no vale más que agua”

Idea obvia e infalible que, sin embargo, debe ser demostrada


El error consistió
en creer que la tierra era nuestra
cuando la verdad de las cosas
es que nosotros somos de la tierra
NICANOR PARRA
Para Diana Cuevas y Frank Aguirre

Buenas noches tengan todos ustedes lectoras y lectores, bienvenidos al primer Congreso Ficticio de Estudio y Defensa del Medio Ambiente. Antes que nada, público interesado, quiero agradecerles por sumergirse en este texto, ya sea por casualidad o accidente, y compartir con ustedes algunas ideas sobre las problemáticas que enfrentamos en la conservación y la defensa del medio ambiente.
En su discurso de agradecimiento, tras haber obtenido el Premio Nobel en 1990, Octavio Paz, que no es santo de mi devoción, -y lo digo sin temor al linchamiento-, esbozó una idea que quisiera ampliar y retomar. En aquella ocasión dijo: “cualesquiera que sean las formas de organización política y social que adopten las naciones, la cuestión más inmediata y apremiante es la supervivencia del medio natural.” Hoy 2014, la cuestión más apremiante que reclama medidas inmediatas, sigue siendo, sin duda, la supervivencia del medio natural, amenazada por la codicia, la ambición y la estupidez de unos cuantos hombres, que además, dicen ser Verdes.  
Si adoptara una postura ingenua, público querido, podría decirles que la defensa del medio ambiente es una tarea sencilla, puesto que, la supervivencia de la naturaleza, de los ecosistemas, de su flora y su fauna, es la supervivencia del género humano, y toda la humanidad tiene interés en que perdure nuestra especie, simplemente por un sentido de conservación nato que nos caracteriza; el cual bien podría resumirse en el temor a la muerte y en los numerosos esfuerzos encaminados a prolongar y conservar nuestra propia vida. No obstante, debo decirles que, esta idea, no es en absoluto obvia.
Si adoptara una postura cínica (como la que normalmente adopta la SEMARNAT), aminoraría o negaría las consecuencias que trae la depredación de recursos naturales, les diría que aprobar una minería a cielo abierto, o bien, la extracción de gas y petróleo por el método de fractura hidráulica, conocido como fracking, no trae consecuencias graves para la salud y el medio ambiente, como por ejemplo, la contaminación y desabasto de los pozos de agua que nutren las ciudades aledañas a las minas y las plantas de extracción de gas y petróleo.
Sin embargo, no voy a ser ni optimista ni cínica, sino clara y pragmática. Voy a tomar como ejemplo el proyecto de minería a cielo abierto de Los Cardones en Baja California Sur, y les voy hablar con datos duros, esos datos que no nos gustan pero demuestran y ponen en evidencia la estupidez y ambición de quienes fomentan iniciativas de este tipo.
Queridos lectores sepan ustedes que, en un día de explotación minera, se usa la misma cantidad de agua que consume una ciudad de 600 000 habitantes, ¿cómo sería posible que una minería a cielo abierto no genere desabasto de recursos hídricos?, más aun si se trata de una mina establecida en una zona desértica como lo es Baja California Sur. Además, en los procesos de extracción de metales como el oro, se utilizan químicos mortíferos como el mercurio, el arsénico y el cianuro, los cuales quedan libres en la atmósfera, mares y ríos, ¿cómo será posible que el aire y el agua no queden envenenados al ser vertidos este tipo de químicos de forma periódica e indiscriminada?
La minería Los Cardones, proyecto que quiere implementarse en Las Playitas de Todos Santos, B.C.S., dejará 56 mil millones de toneladas de desechos con residuos de estos químicos, mejor conocidos como tepetateras, las cuales llegarán al Océano Pacífico, como las 600 000 toneladas que dejó la minera de San Antonio y que ahora yacen en el mar. La planta desaladora de este mismo proyecto, el de Los Cardones, se piensa construir en una zona de anidación de la tortuga golfina y laúd, ambas especies en peligro de extinción, entonces, ¿cómo será posible no aniquilar a miles de organismos invadiendo su hábitat natural y contaminando su espacio vital?
Señores seamos serios, esto no sólo huele a muerte, ¡es peor que la muerte! se trata de la aniquilación del medio ambiente y los recursos que nos otorga, lo que nos confina no a una muerte inmediata, sino al deterioro de la calidad de vida de nuestras generaciones y generaciones futuras, lo que significa una muerte en vida, lenta y progresiva: niños con malformaciones genéticas, escasez de agua, desabasto de alimentos y aumento en su precio por la falta de agua para la producción agrícola. Los pobladores de Baja California Sur, aun sufre los estragos de una minería que se estableció hace 200 años, muchos pozos y extensiones de tierra siguen contaminados a causa de esa minería, y esto no es suficiente para frenar nuevos proyectos mineros y hacer conciencia de las terribles consecuencias que generan.
Quiero decirles que, sin importar los argumentos que contravengan la idea que expresó Octavio Paz en 1990, “la cuestión más inmediata y apremiante es la supervivencia del medio natural”, (pues hay quienes fomentan los ecocidios enarbolando el estandarte del empleo con sueldos de hambre y riesgos para la salud de los trabajadores), se trata de un fundamento y un principio en si mismo: la conservación íntegra y la supervivencia de nuestro planeta Tierra en toda su extensión natural, es la supervivencia del género humano. Ya lo dijo Nicanor Parra en uno de sus ecopoemas, y lo cito nuevamente dejando que él diga por mi lo que ya no puedo expresar de manera más elocuente: “Buenas Noticias: la tierra se recupera en un millón de años. Somos nosotros los que desaparecemos.” Lo que Parra predice con cierto tono sarcástico y burlón, en unas cuantas décadas se dirá en tono de lamento.
Lectores, escuchas, dependemos del frágil equilibrio que aun reina en EL inMUNDO ACTUAL, los desastres ambientales, que deberían llamarse desastre humanos, -pues muchas veces no son sino resultado de la acción irresponsable del hombre sobre la Tierra-, son una advertencia, una señal de alarma y un ejemplo de lo que se avecina. Sin afán de ser fatalista, teleológica, exagerada o catastrofista (CATASTROFISTA? claro que sí pero MODERADA!)[1] O más bien, sin importar que me adhieran con cola loca cualquiera de estos motes, estoy convencida de que el desastre es inminente, quizá sólo aplazable.
Por eso, en lo que debemos pensar de hoy en adelante es en la calidad de vida que queremos para nuestras generaciones y para generaciones futuras, aquellas que aun no ponen un pie en esta tierra y aun no ven la luz del sol. Y a ustedes, estudiantes y profesores que están en la academia tratando de demostrar las consecuencias de la depredación y el consumo irracional por parte del género humano, a ustedes que día a día con su trabajo y dedicación brindan herramientas para frenar la destrucción y encontrar una alternativa para prolongar la vida en este planeta, a ustedes activistas que luchan por hacer consciencia de los problemas ambientales, que no los minimizan ni los ocultan, a ustedes que gritan justicia para la Tierra, quien no puede gritar con esas mismas palabras, a ustedes, colegas, hermanos y amigos, sólo me queda repetirles las palabras de Leonard Cohen, “Si alguien va a expresar la gran e inevitable caída que nos espera a todos, debe hacerlo dentro de los estrictos límites de la dignidad y la belleza”, y agrego, dentro de los limites de la rigurosidad que toda ciencia demanda. Pero sobre todo, pensando que: toda intervención que hagan en pro de la naturaleza será una acto de amor y defensa al género humano.
Por su atención muchas gracias.









[1] Ecopoema de Nicanor Parra, Tomado de http://www.nicanorparra.uchile.cl/antologia/indexpoemas.html, el día 22 de enero de 2014. 


viernes, 1 de noviembre de 2013

"Los centros se desplazan"

Los centros se desplazan


Reseña del festival Entijuanarte Frontera Creativa 2013.



Por Georgina Celaya 


El pasado 4, 5 y 6 de octubre de 2013, se celebró en la ciudad de Tijuana una gran exposición en la explanada del CECUT, la cual contó con propuestas de artistas emergentes de distintos estados de la República, esto dentro del marco de la novena edición del festival Entijuanarte. Tuve la oportunidad de participar en el evento como curadora de dos stands de cuatro artistas, y quedé muy complacida y satisfecha con todo lo que vi, a continuación una reseña de lo más destacado de la producción visual que se mostró en el evento. 

Tijuana dejó de ser frontera para convertirse en un centro donde se dan cita artistas de diferentes partes de la República, principalmente del norte del país. Ahora ya no podemos considerarla simplemente como una ciudad periférica, definida por su condición fronteriza y sus problemáticas migratorias y de violencia, las cuales se han convertido en un estigma y un verdadero lastre para la ciudad. En Tijuana hay algo más que tequila, sexo, maquila y mariguana, y es precisamente una oferta cultural en crecimiento, así como la condición de ser un escaparate para artistas de otros estados, algo que caracteriza al festival Entijuanarte. 

De Torreón Coahuila, después largas horas de viaje en camión y retenes militares, llegó el colectivo “El Chanate Móvil”, una propuesta de cuatro jóvenes que construyeron un taller de grabado y galería ambulante en un triciclo. El vehículo está diseñado con la finalidad de llevar arte a zonas donde hay poca o nula oferta cultural, y está equipado con un tórculo, materiales de impresión y 8 mamparas plegables para la exhibición de los grabados. La temática del trabajo que presentaron para esta ocasión giró en torno a la movilidad ciclista, un tema crucial que compete tanto a las ciudades con un proceso de urbanización caótico y descontrolado -como lo es el del D.F.-, o bien ciudades con alto potencial para ofrecer a sus ciudadanos una vida segura y cómoda sobre dos ruedas, como La Paz, Baja California Sur y Tijuana, por ejemplo.

Dentro de los stands más sobresalientes que  personalizaron cada uno de los participantes está el de Adair Vigil, originario de Saltillo, Coahuila, un artista que trabaja a base de  cut out, es decir, recortando superficies de papel y recreando la flora que surge, por ejemplo, de pasaportes, los cuales le son obsequiados. Adair interviene  objetos en los que las formas vegetales que emanan de ellos, regresan al papel a su estado primigenio de manera metafórica.

De Baja California, lo más destacado fue Nade Urquieta (Tijuana) con su serie Hembras, rostros de mujeres muy femeninos y estetizados hechos con una mezcla de técnicas que van desde dibujo, acuarela, collage con retazos de tela, hasta fotografía e intervenciones digitales. Cabe destacar que sus piezas tuvieron un éxito comercial bastante notable.

Cheram Morales nacido en “la mera Tijuas”, presentó un tríptico de maderas grabadas que muestran tres personajes, uno de ellos, ‑un trabajador de la maquila‑ está acompañado con la siguiente frase: “Estoy cansado de ser el maquilador de sueños de unos cuantos en el poder”; también un wheatpasting que aun se puede encontrar en las calles de Tijuana. Cheram es uno de los talentos artísticos más activos de Tijuana, su trabajo bien podría definirse como estética relacional, pues sus proyectos crean intersticios donde es posible el esparcimiento y el descubrimiento del arte (Parada Art-bus, obras pictóricas que ensambladas forman una banca para la parada de camión, en zonas sin infraestructura adecuada para el transporte es un ejemplo). Junto con un equipo multidisciplinario, Cheram Morales ha llevado a cabo diferentes iniciativas como proyecto Traila, un espacio en sí mismo para el desarrollo de actividades artísticas que busca involucrar a comunidades de la periferia de la ciudad.

En el stand de Richard Mendtorr -también originario de Tijuana-, se podían apreciar una serie de óleos y dibujos con una alta carga de crítica social, haciendo referencia, entre otros temas, a la alienación que genera la religión, o bien a los efectos que produce una célula familiar disfuncional en un niño de secundaria, uno de sus tres alter egos. Mendtorr posee una técnica pulida que habla del dominio del material y el soporte con el que se expresa, además, es un artista completo que ha trabajado en la construcción de su imagen pública-artística,  mediante la creación de personajes que están presentes en toda su obra, haciendo de la pintura un acto performático más que mimético, en el sentido de copia de la realidad y de representación. 

Desde La Paz, B.C.S., Gabriel Rodríguez, mejor conocido como “El Gabo”, presentó una serie de cuadros abstractos en los que juega con la composición de la línea de horizonte, el accidente y la textura. Su stand contó con un sillón que podía ser intervenido con latas de spray y plumones, una de las mejores estrategias de interacción con público de todo el festival. El stand del Gabo se convirtió en un “espacio zen” de descanso para los artistas (la mayoría de ellos desvelados, crudos o agotados), quienes acudían a el como a un oasis, ya sea para beber, fumar, dormir o simplemente contagiarse de la buena vibra del artista.

De Mazatlán, Sinaloa, Carlos Zazueta, quien se acerca al arte desde el diseño gráfico, hizo una selección de lo más representativo de su producción para el público de Tijuana. En su stand había una obra de la serie le Paisajes extranormales, un conjunto de piezas que se miran en 3D con la ayuda de un par de lentes rojiazules. Además, presentó un conjunto de obras en las que mezcla técnicas tanto alternativas como tradicionales, que incluye pintura, gráfica, serigrafía, ilustración, dibujo e impresión digital. Una de las obras más lúdicas y dinámicas de su propuesta es Acción, tiempo y lugar, una impresión sobre dos láminas de acrílico transparente que generan distintos planos, los cuales envuelven al espectador en la contemplación de un paisaje psicodélico acompañado de bellas ballenas. Carlos Z., nombre artístico del sinaloense, tiene una propuesta fresca y sencilla que deja ver mucho de la actitud del artista ante la vida, su versatilidad es una característica que define su trabajo, y sin pretensión alguna, logró ser de lo más sincero en el festival.

Otro proyecto que se presentó en Entijuanarte 2013 fue RD galería, un espacio inaugurado en el 2010 para impulsar a los artistas emergentes de Aguascalientes, dentro de sus propuestas más sobresalientes está el trabajo de JF Elías, quien destacó con la pieza La soga de la cordura, un políptico conformado por  tres dibujos y un cuadro más donde reza lo siguiente: “Somewhere better than this place”. La obra es una alusión a ese “algo invisible” que mantiene la tensión adecuada entre la delgada línea que separa la vida y la muerte, en esta pieza se pueden apreciar dos cuerpos femeninos desnudos, una osamenta y una cabeza de cerdo de carnicería, todo cuelgan de una soga donde la estabilidad es ilusoria y vulnerable; todos los elementos en los cuadros buscan estar “en algún sitio mejor que este lugar.” 

La escena cultural que se está desarrollando en Tijuana, junto con la experiencia de vivir la ciudad y consumir la cultura que oferta, genera la impresión de que el centro, ‑entendido como una construcción simbólica más que geográfica‑ se está desplazando hacia al Norte, y que la frontera ya no es más una zona limítrofe, sino un nuevo espacio de discusión y creación artística. En definitiva se están generando nuevos puntos de encuentro en el país, o bien centros más activos e innovadores, y Tijuana es uno de ellos, pues no sólo cuentan con una producción local propia bastante notable y de alta calidad, sino que ahí están confluyendo varios artistas del norte. 

Googlealos y Feisbuquealos:

Artistas que participaron en el festival y que debes conocer: Valeria Alvarado (Xalapa), Anahí Tirado Miranda (D.F.), Cynthia Chong (D.F.) y Normuerto Cano Rea (Coahuila).

A continuación lo sitios electrónicos de los artistas. 


Adair Vigil (Saltillo, Coahuila)


Colectivo Chanate Móvil (Cohahuila)


Nade Urquieta (Tijuana)


Cheram Morales (Tijuana)


RicHard MendTorr (Tijuana)


Gabriel Rodriguez Gabo (La Paz, B.C.S.)


Carlos Zazueta (Mazatlán, Sinaloa)

https://www.facebook.com/carlos.zeta

RD Galería (Aguascalientes)


Link del festival: 

http://www.entijuanarte.org/entijuanarte/mapa.php?no=0&id=13